Dietas “Carbofóbicas”.

Según el DR Permulter el gluten, el azúcar y los carbohidratos destruyen el cerebro

Incluso los más saludables, como los cereales integrales o la fruta, pueden causar demencia, trastorno por déficit de atención, ansiedad, dolor de cabeza crónico y depresión, entre otras dolencias

Estas absurdas afirmaciones se expone en la sinopsis del libro Brain Grain el neurólogo americano Dr.Perlmutter,

En el libro blanco de la nutrición en España que publicó la FEN el año 2013 encontramos la siguiente afirmación: “Los hidratos de carbono son, a parte de su papel estructural y regulador, […] la base de la alimentación humana. Pero la población considera que los carbohidratos “engordan” por lo que son perjudiciales. Su aporte al contenido calórico de la dieta disminuye a medida que el poder adquisitivo aumenta […]. De esta forma se produce un consumo elevado de alimentos de origen animal y de productos precocinados y edulcorados, disminuyendo el contenido en la dieta de hidratos de carbono y aumentando el de grasas y proteínas, lo que conduce a un perfil calórico inadecuado […].

http://www.fesnad.org/pdf/Libro_Blanco_FEN_2013.pdf

Según indica el informe publicado conjuntamente por la FAO y la OMS Diet, nutrition and the prevention of chronic diseases, “el grueso de las necesidades calóricas debe ser cubierto por los hidratos de carbono (entre un 55 y un 75% de la ingesta diaria), pero que los azúcares refinados (añadidos), deben mantenerse por debajo del 10%”.

http://whqlibdoc.who.int/trs/who_trs_916.pdf

 

En contra de todas estas opiniones el Dr Perlmutter  Afirma que lo óptimo es la llevar una dieta baja en carbohidratos y rica en grasas para mejorar la salud del cerebro, pese a que la principal fuente de energía utilizada por éste es la glucosa, y que  se conoce que de una dieta rica en grasas genera un estado cetogénico en nuestro cerebro disminuyendo la excitabilidad neuronal.

En el libro menciona que la dieta alta en gluten y carbohidratos que siguen los países desarrollados está destruyendo nuestro cerebro, causando patologías mentales como el alzhéimer entre otras. Según menciona, la mayoría de éstas se podían curar con la dieta que propone. Ésta dieta se basa en eliminar el consumo de gran parte de los farináceos, tanto integrales como refinados, (pan, pasta, postres, refrescos, cereales de desayuno, bebidas de frutos y cereales) y en incrementar el consumo de grasas saludables (oliva virgen extra, nueces, semillas, carne de res de gama libre, pescado, huevos, aves de corral, frondoso o verduras de color oscuro).

En su libro, el doctor expone muchos artículos que, según él, demuestran sus teorías, la verdad es que la mayoría de los que utiliza son observacionales, de manera que no puede deducir una causa-efecto de éstos; además, pese a ser un neurólogo, no aporta ningún estudio propio en el libro, solo expone algunos pacientes cómo testimonio para demostrar que su dieta funciona, hecho irrelevante des de el punto de vista de la evidencia científica.

En resumen, aporta características casi milagrosas a su dieta, y la mayoría de argumentos que presenta para demostrar sus teorías no son válidos des de el punto de vista científico.